[05/08/2024] Recientemente, el Uptime Institute realizó la presentación de los resultados de su estudio Global Data Center Survey 2024. En esta edición, la número 14 que realiza, se revela que la industria se está expandiendo y que también está planeando grandes cambios tecnológicos, económicos y operativos. Como señala el Uptime Institute, la demanda de servicios digitales continúa creciendo -no solo en volumen sino también en intensidad de cómputo- lo cual desafía las capacidades de energía y enfriamiento de gran parte de la infraestructura existente.
En la presentación del estudio estuvieron presentes Douglas Donellan, analista de investigación; Andy Lawrence, director ejecutivo de Investigación; Chris Brown, chief technical officer; y Daniel Bizo, director de Investigación, todos del Uptime Institute.
Los resultados
En el estudio se abordaron algunos campos con respecto al desarrollo que han mostrado los centros de datos hasta la actualidad. Así, se tocaron temas como los benchmarks de la industria, la sostenibilidad y sus métricas, la innovación y su impacto, la resiliencia y las caídas, la nube y el aprovisionamiento, y la falta de personal capacitado.
Antes de tocar el primer punto, se mostraron los resultados concernientes a las mayores preocupaciones que tienen los administradores de centros de datos en la actualidad. El primero de ellos fueron los costos. Estos se han convertido en la prioridad de los administradores de los centros de datos en el presente estudio, y se encuentran basados en el alza generalizada de los precios y en las inversiones que se requieren para satisfacer el crecimiento de la demanda. De hecho, más de la mitad de los proveedores reportan patrones de gasto superiores a los normales en los centros de datos. En cifras, el 44% de los encuestados sostuvo que se encuentra 'muy preocupado' por los costos, y el 36% indicó que se encuentra 'algo preocupado'; el 17% manifestó que se encuentra 'ligeramente preocupado', mientras que sólo el 3% indicó que no se encuentra preocupado.
En cuanto a prever los futuro requerimientos de capacidad del centro de datos, el 30% indicó que se encuentra 'muy preocupado', mientras que el 38% sostuvo que se encuentra 'algo preocupado'. En general, si se suman los casos de 'muy preocupado' y 'algo preocupado' se puede observar que los encuestados tienen un sentimiento similar en cuanto a la mejora del rendimiento de la energía para los equipos (69%), falta de personal calificado (71%) y la mejora para el rendimiento de la energía para TI (64%).
Ya ingresando al primer punto de la presentación, los benchmarks de la industria, el estudio indica que la eficiencia en el uso de la energía (PUE, por sus siglas en inglés) se ha mantenido casi inalterable en el 2024, con 1,56. El año pasado, el 2023, este indicador llegó a 1,58 y el año anterior a 1,55. Este indicador -que mientras más bajo mejor la eficiencia- cayó significativamente hasta el 2018 y se ha mantenido alrededor de la cifra actual en los últimos años. Por ello, el estudio señala que se ha mantenido plano, pero indicando también que es posible que las innovaciones se mantengan ocultas a simple vista, y que los promedios se mantienen en esos niveles debido a que hay muchos equipos antiguos y legados; de hecho, el 47% de los encuestados sostuvo que trabajan en instalaciones con más de 11 años de antigüedad.
Otro de los puntos que se trató fue la densidad de los racks. El estudio muestra que se está produciendo un cambio hacia racks con mayor uso de energía; de hecho, casi un tercio de los encuestados señala que se está produciendo un 'rápido crecimiento' en la densidad energética de los racks, mientras que alrededor del 50% sostiene que este crecimiento se está produciendo 'lentamente'. Específicamente hablando de la energía de los racks, el estudio señala que los racks de 4 a 6 kW son los que más se han implementado, pero son los de 7 a 9 kW los que muestran un incremento notable en los centros de datos. Un paso de 6 a 9 kW representa un incremento de 50%, lo cual se traduce en un correspondiente incremento en el uso de la energía en el centro.
Pero el que los racks de 7 a 9 kW sean los de mayor crecimiento en los centros de datos, ello no implica que sean los de mayor uso de energía. Se puede encontrar racks de hasta más de 70 kW, pero ellos solo representan el 4%; mientras, los más comunes son aquellos que muestran densidades menores a los 10 kW. Las densidades altas más comunes son las que se encuentran entre 15 a 29 kW, de acuerdo con el estudio.
Es evidente que todo este crecimiento en el uso de la energía se debe a la mayor demanda de parte de las cargas de trabajo, y podría ser lógico pensar que uno de los factores que impulsa este crecimiento es la inteligencia artificial. La verdad es que el estudio muestra que la inteligencia artificial se encuentra en la cuarta posición entre las cargas más consumidoras. La primera es la 'infraestructura densificada para aplicaciones de negocios' con el 49% de las respuestas de los encuestados; le sigue la 'computación de alto rendimiento con aceleradores' con el 33% de las respuestas; la 'computación de alto rendimiento sin aceleradores' con el 19% de las respuestas; y recién en la cuarta posición se encuentra el 'entrenamiento de inteligencia artificial generativa' con el 15% de las respuestas, seguida de la 'inferencia de inteligencia artificial generativa' con 8% y, al último, el 'entrenamiento de inteligencia artificial (no generativa)' con sólo 5%.
Sostenibilidad y métricas
El estudio señala que en este campo hay un tema por resolver. De todas las métricas que se podrían utilizar para medir la sostenibilidad, en realidad, los centros de datos se concentran sólo en dos: la PUE y el consumo de energía. Esto se debe a que son métricas que también se pueden utilizar para monitorear desde el punto de vista del negocio la salud del centro de datos. Otras métricas como el uso del agua, consumo de energías renovables y las emisiones de carbono, son menos utilizadas.
De hecho, el consumo de energía es utilizado por el 89% de los encuestados, el PUE por el 76%, el consumo de agua por el 43%, el uso de energías renovables por el 41% y las emisiones de carbono (Scope 1) por sólo el 36% de los encuestados.
El estudio señala "esto es preocupante ya que muchas de estas medidas serán solicitadas por la regulación que ya ha sido aprobada o se encuentra pendiente”. Pero también reconoce que la recolección de estas métricas puede ser complicada porque no hay métodos estandarizados para generar o capturar el uso que hace TI de estos elementos y lo que se tiene son solo estimados. Por ejemplo, en el caso del agua se tiene el problema de que se puede utilizar agua potable y no potable, y reutilizar algo de ella.
De hecho, se piensa que los gases de efecto invernadero aún se encuentran bien reportados, principalmente porque sólo una pequeña parte de las organizaciones reportan sus emisiones de carbono siguiendo el Greenhouse Gas Protocol. Entonces, queda trabajo por hacer en el campo de los reportes de sostenibilidad.
La innovación y el impacto
Con el auge de la inteligencia artificial generativa es lógico pensar que la mayoría de las organizaciones se encontrarían ansiosas de incorporar herramientas de inteligencia artificial para ayudarlas en sus quehaceres diario. Lo singular del reporte es que ese no es el caso de los centros de datos. Por el contrario, año a año, se puede ver una reducción en la confianza que tienen los centros de datos en esta tecnología.
El reporte indica que en los centros de datos la confianza en el uso de la inteligencia artificial para la toma de decisiones operativas ha ido reduciéndose en los últimos tres años. En el 2022 el 76% afirmaba que utilizaría la inteligencia artificial para la toma de decisiones operativas; esa cifra cayó a 64% al año siguiente y a 58% este año. Esto se debe a las conocidas fallas que han tenido los sistemas de inteligencia artificial generativa durante este año.
A pesar de ello, los encuestados no niegan que perciben en la inteligencia artificial algunos beneficios. El 58% de ellos sostiene que puede ofrecer un incremento en la eficiencia de las instalaciones, el 55% indica que puede ofrecer una reducción en el riesgo del error humano, el 45% manifiesta que puede ofrecer una mayor productividad en el personal, el 43% apunta que mejora el desempeño de TI, el 42% asevera que reduce el riesgo de fallas o caídas en los equipos, mientras que el 37% considera que reduce los costos de mantenimiento o servicio.
Además, nueve de cada 10 proveedores consideran que la inteligencia artificial será ampliamente utilizada en los centros de datos en los próximos cinco años para mejorar la eficiencia y la disponibilidad operativa.
Resiliencia y caídas
Con seguridad una de las preocupaciones más grandes de los responsables de los centros de dato son las caídas; afortunadamente, el estudio señala que la mayoría de las caídas de los últimos tres años han tenido poco impacto sobre la operación. El 53% de los encuestados afirma haber tenido una caída en los pasados tres años, pero solo el 3% de ellas se puede calificar como severa, la mayoría han sido 'insignificantes' (38%) o 'mínimas' (38%). El 15% de ellas fue calificada como 'significativas' y el 6% como 'serias'.
A pesar de ello no se puede negar que todas ellas implican un costo sobre la organización. Pero, nuevamente, sólo una de cada cinco (20%) de ellas ha implicado un costo de un millón de dólares o más. La mayoría de ellas, el 46%, han tenido un impacto menor a los 100 mil dólares, y un tercio de ellas (33%) han costado entre 100 mil a un millón de dólares.
La causa más común de las caídas son las fallas en la energía (54%), seguida por el enfriamiento (13%), falla en los sistemas de TI (hardware o software) (11%) o las redes (12%), entre otras. Lo destacable en este punto es que las fallas provenientes de TI o las redes se han incrementado en ocho puntos porcentuales con respecto al año pasado, algo que podría deberse el incremento en la complejidad de las redes y al creciente rol del software-defined networking y la TI distribuida.
Nube y aprovisionamiento
Aunque la nube se encuentra en todos lados aún sigue siendo el centro de datos de la empresa el lugar en el que corre la TI de la firma en su mayoría, aunque sí se puede percibir una reducción en esta cifra año a año. En el estudio del 2024, los centros de datos corporativos tienen el 45% de las cargas de la empresa, una cifra menor al 48% del año pasado y al 58% del 2020. Se estima que esta cifra caiga a 42% en el 2026.
El segundo lugar en donde se colocan las cargas de la firma es en los centros de datos de colocation, ahí se encuentra el 18% de las cargas, en este año. La cifra ha crecido respecto al 14% del año pasado y al 16% del 2020, pero podría caer al 17% en el 2026. La nube pública recién se encuentra en el tercer lugar con 10%, seguida del hosting con 9% y el server closet/IT room también con 9% y el SaaS con 5%. El centro de datos micro o edge solo es de 4%.
El 61% de los encuestados afirma que utiliza a alguno de los hyperscalers, pero la mayoría (29%) de los encuestados solo coloca entre el 21% a 40% de sus cargas en ellos.
Personal
Finalmente, el estudio señala que los centros de datos siguen en busca de personal calificado. La falta de personal se mantiene en niveles aún altos. Así el 39% de los encuestados afirmó que tienen falta de personal en los niveles medios y junior, el 33% indicó que requiere personal en el campo eléctrico, el 32% sostuvo que requiere personal en el campo de Operaciones, y así en áreas como mecánica (30%), diseño (27%), arquitectura y desarrollo de nube (25%), senior management/estrategia (20%), cableado/TI (16%) y otros (6%).
Jose Antonio Trujillo, CTOPerú